Como muchas cosas en la crianza de los hijos, usar o no chupete es una elección de los padres que tiene que ser respetada. Mi pareja y yo optamos por no darles chupetes a nuestros hijos En este post te explico el porqué.
Sé que eres una persona ocupada, por lo que puedes leer este post ahora o escucharlo cuando te vaya mejor en el capítulo 4 del podcast «Camino a Zensei».
Este es un tema que me da la sensación que pocas personas se plantean. Incluso dentro del entorno de la crianza con apego, hay muchos padres que lo usan.
Por eso, aquí hablo desde mi experiencia como padre. Nosotros optamos por no dar chupete ni a Alan ni a Cloe. Nuestra principal motivación fue por permitir una lactancia más orgánica, no podemos olvidar que el chupete es un sustituto de la teta y al darlo podemos “distorsionar” la necesidad de mamar de nuestro bebé. Cuando uno opta por dar el pecho a demanda, lo hace cada vez que el bebé lo pide. Cada vez que está con el pezón en la boca es una oportunidad para estimular el pecho y que la madre produzca más cantidad de leche. Este tema me gustaría abordarlo con más detenimiento en otro post.
En muchas ocasiones, aún con el pezón en la boca, el bebé ya no está mamando, solo es un consuelo, un hilo de contacto con su madre. Hasta cierto momento de su crecimiento, la boca es el puente entre el mundo y nuestro bebé, y es por esto que se llevan todo a la boca, es una forma de conocer lo que les rodea.
¿Qué vas a encontrar?
El chupete es algo tan asumido en nuestra sociedad, que la gente los incluye con normalidad en los regalos a los recientes papás. A las semanas de nacer Alan vinieron unos amigos a vernos a casa, ya habíamos retrasado la visita una semana. Al abrir lo regalos nos encontramos con unos chupetes con el nombre de Alan serigrafiado… qué mal nos supo. Imagínate la cara de nuestros amigos cuando les dijimos que no le dábamos chupete a Alan (desde aquí un abrazo a Oscar y Àngels). Con toda su buena voluntad se habían molestado en grabar el nombre de nuestro hijo y, como no llegaban a tiempo, habían retrasado una semana su visita, ése era el motivo. Tengo que decir que aunque nunca los llegó a usar, los guardamos con cariño.
Atender la demanda del bebé
Otro motivo de no usar chupete es por atender la demanda del bebé, si no es con teta, con brazos. Siempre me ha hecho gracia eso de que a un niño se le mal acostumbra por dar brazos. No conozco a nadie que le hayan sobrado besos y abrazos de sus padres. Cuando uno bebé llora, necesita ser atendido. Tiene sueño, hambre, caca, está molesto, le duele la barriga, quiere a mamá, lo que sea, pero necesita algo. Creo que como sociedad estamos demasiado acostumbrados a tapar nuestras necesidades o bien al contrario pedirlas de un modo descontrolado. Me pregunto si tendrá algo que ver.
No es un camino de rosas
No te voy a engañar, en ocasiones no dar chupete no es un camino de rosas. Con el tiempo lo recordamos como algo anecdótico, pero pasamos algunos malos ratos. Cuando Alan era pequeño vivíamos algo alejados de familia y amigos y nos teníamos que desplazar a menudo en coche. Había un momento del viaje, a partir de los 20 minutos que Alan se ponía a llorar y se hacía difícil atenderlo. A veces optábamos por hacer varias paradas hasta llegar a casa. En otras ocasiones, al ver que con parar no solo no se solucionaba la situación sino que además se hacía más largo el viaje, Lores hacia contorsionismo y le daba el pecho mientras seguíamos en marcha. Imagínate la estampa, de poco que no acabamos en el circo.
Es curioso ver ahora a mis hijos, ya más grandes, como juegan con sus bebés y sus complementos, porque raro es el muñeco que no incorpora ya el chupete y el biberón. Nos resulta curioso ver como juegan y simbolizan con ellos. Han asumido el chupete porque lo han visto a otros niños, pero tienen claro que nunca lo usaron y a veces nos piden que se lo contemos, como el que cuenta un cuento. Era se una vez un niño y una niña que nunca tuvieron un chupete…
¿Qué opción tomaste tú? ¿Cuál es tu experiencia? Estaré encantado de leer tus comentarios.
Aunque nos equivoquemos, aunque nunca seremos perfectos, seguimos avanzando, seguimos creciendo. Somos los mejores madres y padres para nuestros hijos.
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Yo si que me lo he planteado eso de ponerle o no chupete. Al principio no queria ahora me lo pienso como momentos puntuales, como precisamente para el coche que también se pone nerviosa en ocasiones. Soy de la opinión de si se lo doy que no sustituya la teta, quiero que siga durmiéndose así, relajándose así…etc etc…a día de hoy aún no lo he probado y aún no se si al final se lo pondremos o no…
Saludos
¡Gracias Carmela por tu comentario! Este tipo de dudas son muy normales, lo importante es que tú te sientas cómoda y encuentres la forma de gestionarlo. Con nuestra hija Cloe (es la peque) mi pareja tuvo dudas de si usarlo o no en algunos momentos puntuales. La situación también era para ella más estresante por que tenía la demanda de los dos peques, pero finalmente no hizo falta. Estaré encantado de saber como os ha ido. ¡Un abrazo!